jueves, octubre 02, 2008

La edad no perdona

Ando preocupado.

Por dos razones.

La segunda de ellas es porque mi PC me acaba de dar un vuelco al coraçao.... sabiamente resuelto usando la combinación mágica, Ctrl+Alt+Supr.

Y se preguntarán "¿Dónde se ha metido la primera?"

Todo puede resumirse en que mi cuerpo me manda señales de envejecimiento, yo me resisto a aceptarlas... pero sucumbo.

Vamos, que me entra el sueño a las 23.00 como muy tarde y por más que lucho, no puedo evitar caer dormido.

"No será pa´ tanto", dirán algunos. "Eso es por las duras jornadas de trabajo", aducirán otros. "Se debe a la tensión que acumulamos", argumentarán los más osados.

Pues no lo tengo claro. Lo que está contrastado es que anoche mismo, tras el habitual aquelarre familiar nocturno en casa de los Portus, a las 23 me dije "venga, un capitulillo de Prison Break que son 40 minutos de nada y a dormir", con lo que procedí a retirarme a mis aposentos y a ello me puse. De primeras todo bien: una trepidante as usual entrega más de una serie que debía haber terminado 3 temporadas atrás. De súbito, empecé a "cabecear" tumbadito en mi camuca (sé que resulta una visión tremandamente excitante, pero ruego repriman sus instintos más primarios). Hasta que abrí los ojos para descubrir con pavor que la pantalla del portátil estaba negra negrísima, maportu ya se había ido al sobre, sabe Dios en qué momento y si yo me despedí de ella, y eran las 00.20.

Tras una rápida comprobación via rewind del BS Player comprobé que a eso del minuto 28 me había quedado sopa... y había "visto" fragmentos siguientes del capitulo, lo cual ayudó a que me explicase el cacao mental que me había producido y evitó que tratase de seguir hilando lo (poco) que había acertado a ver, pensando que los guionistas y directores de esta 4ª temporada habían apostado fuerte por el estilo tarantiniano frenético y desordenado.

Mu triste, señores. Y encima ayer llevé al curro lentejas para comer y me dejé la cuchara en casa. Y uno es hábil y mañoso, pero eso de cazarlas con cuchillo y tenedor como que es tarea ardua incluso para mi. Suerte de Juanisho y sus cucharas de plástico.

Ya no hay marcha atrás. La cuenta regresiva ha comenzado y no hay remedio posible*.



* Salvo que uno sea Benjamin Button y vaya al revés de lo que está mandado. Pero debo advertiros que sólo unos pocos mejoramos con la edad como le ocurre a tito Brad, nenes.

4 comentarios:

Juan_isho dijo...

Te quemas, te duermes, se te olvidan las cosas....
Tú antes molabas tío.

el_irlandés dijo...

Lo realmente jodido empieza cuando uno entra a un super y en vez de pensar que necesita calimotxo, recuerda que se le ha terminado el pan rallado. Eso si es jodido.

Lo de olvidarse de cosas a mi me pasa cada sabado por la noche. Es perfectamente normal. Un metodo de autodefensa del cuerpo, que es muy sabio.

Miss.Burton dijo...

Yo creo que ahora empieza tu GRAN EVOLUCION: Hacer lo que a uno le salga del nabo, dormirte donde te plazca con compañía al lado, y a la hora que sea, las once es ideal para ir volviéndose setatotal.. y bueno, que lo de olvidar cosas, nos pasa a todos... Ya verás cuando tengas mi edad.. sólo te acuerdas de los tacos, y poco mas.. Sí, remítete a las pruebas...
Ponte la cuchara pegada al taper con celo, tío, punto. Ya ves que hay remedio para todo... Eso sí, lo de que te duermas a las once sí me preocupa... Pero vamos, lo importante es que a ti no te afecte. Ah, y recuerda la manida frase que dice: Dormir engorda... lo digo porque en estas edades la barriga va por una parte, y el body por otra...
BSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS

Unknown dijo...

coño, el pan rallado!!

gracias irlandés!!