lunes, junio 06, 2005

Los 12 yedáis-apóstoles

Érase una vez en una galaxia ni la mitad de lejana de lo que creen, un grupo de alegres muchachos que sin ningún tipo de dedicación y con menos ganas aún, iban a diario a un edificio que se inclinaba hacia estribor. Edificio de proporciones colosales en el que moraban algunos de los más viles y mezquinos seres que jamás vio un yedai del lado no oscuro (o lado perlán) de la fuerza. Estos tipejos protagonistas de la historia, que no merecen ningún tipo de respeto “whatsoever” que diría cualquier irlandés, eran los elegidos para salvar el futuro de la tasca, bar o cafetería del ya citado edificio. Lugar prohibido para los auténticos yedais, estaba cayendo en el iconomato y en el olvido de los más jóvenes que se dejaban embaucar por las enseñanzas de los maestros que aseguraban era antro de maldad y perdición. Sin embargo, nuestros héroes-infraseres, intuían que había algo más, así que desoyendo las indicaciones de los más sabios se adentraron en el anverso o anvés tenebroso de la fuerza y cruzaron el umbral del templo maldito (sí, como nuestro amigo jones). Allí lograron habilidades jamás soñadas por un yedai de bien, alcanzaron altísimas cotas de dominio naipil, vislumbraron tangas y tirachinas que jamás se dejaban ver por otras estancias del edificio, conocieron al único ser de la galaxia que consigue sobrevivir con una neurona enfarlopada, admiraron como, sin más que contemplar un par de monedas, este mismo ser podía salir de su cuerpo y hacer viajes cósmicos al universo paralelo de las sumas y las restas y conseguir en menos de 10 minutos saber que su neurona no daba y llamar pidiendo socorro a sus viles secuaces para que te devolvieran el cambio. Todas ellas experiencias asombrosas (sobre todo hacer hincapié en la de los tangas y las tetas, cote dixit) que les llevaron a un dominio de su sable inalcanzable para el resto de aprendices (he dicho sable y sable es, nada de láser detrás, sable a secas), hasta, después de cruentos enfrentamientos con los maestros, convertirse en esto:


I'm so proud of you guys!

4 comentarios:

Portu dijo...

En una próxima entrega podrán todos ustedes disfrutar de una foto del temido regente de la taberna telekil.

Portu dijo...

Por cierto, el que salga torcido en la foto se debe a mi escoliosis (esa espalda mía que tanto le gusta a Gal), no a que sea muy chulo (que también)

Juan_isho dijo...

Pero mira que tenemos clase.
Lo habría titulado, " La Liga de los Hombres extraordinarios". Porque no nos engañemos, lo somos. Aunque con nuestro camarero, si solo le ves a el, se podrían equivocar con " La isla del doctor Moreau".

Juan_isho dijo...

Pero mira que tenemos clase.
Lo habría titulado, " La Liga de los Hombres extraordinarios". Porque no nos engañemos, lo somos. Aunque con nuestro camarero, si solo le ves a el, se podrían equivocar con " La isla del doctor Moreau".