miércoles, noviembre 23, 2005

Cinco hombres y un destino, la victoria (Versión extendida)

Pues sí señores, lo prometido es deuda y aquí me tenéis dando el callo, trabajando como un negro, sudando como un luchador de sumo en una sauna. El tercer partido de nuestra, ya menos penosa, actuación en el torneo rector 05/06. En el vestuario nuestro rostros no mostraban más que preocupación. Éramos cinco, por favor no hagáis la rima fácilona, sed más ingeniosos, y esperábamos enfrentarnos, por informaciones recibidas, al más fiero de los enemigos que nosotros, los superhéroes buenos, podíamos encontrarnos. Era el equipo de supervillanos que mejor trataba la pelota desde hace mucho tiempo, conocíamos a Rastaman, aunque no estaba por ahí. Un hombre capaz de con su peinado, rastas, controlar la mente de sus adversarios, consiguiendo con ello derrotarles en el mano a mano, aunque su poder es limitado. También conocíamos a El bloque, un portero cuya portería no había sido penetrada por nadie, sus poderosas manos de acero gigante lo impedían. Y otros muchos supervillanos de los que ya hablaremos. Pero nosotros sólo eramos five, a ver si ahora rimáis cabrones, y no nos ibámos a dejar amedrentar por semejante panda de granujas. Salíamos al terreno de juego, pero allí no se encontraban nuestros temidos rivales, sólo encontramos a los temidos, pero ya superados "cabrones-que-metían-todos-los-goles-iguales" del anterior encuentro. El ambiente se relajaba, calentamiento tan chorra como siempre, bromas, risas... lo clásico de todos los partidos que nos meten gorrada. En un momento dado se me ocurrió preguntarle al árbitro por nuestros rivales. De repente los nubarrones se tornaron en ilusiones. Todas nuestras predicciones eran erróneas. No nos enfrentábamos con los supervillanos. Era el día de luchar por evitar la temida CUCHARA DE MADERA. Para poco más que una serie de consignas del tipo: "Somos pocos, el que lo necesite que se cambie y se ponga de portero", o "Hay que perder todo el tiempo que se pueda" y esas cosas que se suelen decir cuando juegas un partido con los justos. El árbitro nos solicita para el sorteo y lo ganamos. 1 - 0, jejeje. Todo está presto y dispuesto para comenzar el partido.

Crónica

Los dos cincos están preparados para la batalla a vida o muerte. El honor y deshonor de evitar o llevarse la famosa cuchara de madera está en juego. Sobre el papel ellos eran favoritos. Venían de encajar una trisca de espanto, pero tenían un cambio. Y lo principal: sus zapatillas de futbol parecían mejores, detalle. Después de este primer análisis visual comienza el partido. Primeros compases de tanteo por parte de ambos equipos. Ya en esos momentos se les vió que era un equipo de gente maja en general, pero que tenían al clásico Paulo Roberto en pista, y Ronaldo en campo, frustrado del deporte. Estos primeros minutos fueron de constantes ataques, especialmente nuestros, que poco a poco nos íbamos apoderando tanto del tiempo, como del control del partido. Los rivales bailaban al compás de la música que nuestros genios tocaban. Queremos jugar rápido, se juega rápido. Que paramos un poco, pues se paran. Cada vez nuestro control era mayor, a pesar de que ellos intentaron en alguna ocasión acercarse con disparos poco efectivos hacia nuestra portería. Y esta vez fueron ellos los que cometieron nuestro error: se empezaron a creer que nos podían meter un gol, ilusos, y se vinieron todos al ataque. En ese mismo momento nuestros equipos especiales defensivos actuaron con premura y eficacia para recuperar el balón y dárselo a Guardiola (ya no es Diego), y con una increíble conducción de pelota atrajo al único rival que bajó para ceder, muy generosamente, a su hermano, que con un pequeño toque de cadera sienta al portero para con un pasito más y con toda la portería para él convertir el 1 - 0 al marcador, y este sí era de verdad. Éramos una piña. Nos juntamos todos para dar un par de consignas más y a seguir trabajando como lo estábamos haciendo. En un arranque de rabia salieron con todo para intentar igualar el marcador lo antes posible, pero estando en portería Ed "Juanisho" Warner su labor era realmente difícil. Tiraban y tiraban, pero cuando no se encontraban con la defensa allí estaba Ed.

La picardía de los rivales les llevó al juego sucio, tratando a través de lo que se denomina vulgarmente como balonazo en los huevos eliminar a Ed. No lo consiguieron, aunque por momentos mermaron sus facultades. La siguiente jugada fue un balón lejano cómodo para el portero, pero el persistente dolor de sus partes le impidió ver con claridad la solución a tan sencilla jugada y erró. Despejó suave y con el pie, quedando un balón franco que no entró en la portería por la acción de la defensa. El equipo parece que se venía abajo, pero en ese momento apareció el Rookie del mes de Noviembre. Adrián recoge una pelota, con inicialmente poco peligro, se la coloca, quiebra a un defensa, la vuelve a colocar, y con un certero remate a la cepa del poste consigue batir al portero rival. 2 - 0 y qué mejor forma de sacudirse la presión de los rivales. Ellos volvieron a salir con rabia. En la primera jugada, Noel sufrió un golpe que a punto estuvo de dejarle KO. Todos teníamos el corazón en un puño hasta que levantó su dedo dando la señal de que podía continuar. Era evidente que ellos no estaban contentos, y en otro arreón su jugador más decisivo lanzó un pelotazo abajo. Ed trató de atajar, pero no pudo. La pelotita se colaba lentamente en la portería, muy poco a poco, pero llegó desde donde no se pone el Sol, Antonio Helguera, para sacar el balón de la línea. ¿Gol fantasma? El árbitro y yo mismo lo vimos muy claro: no llegó a la línea. En ese momento nos acordamos de Saúl, que seguro que la hubiera empujado hacia dentro y lo habría celebrado con la cucaracha o similar. Fue su ocasión más clara de gol en el primer tiempo, que estaba agonizando. Tanto agonizaba, que el árbitro indicó el camino al grifo de agua.

Descanso con victoria, y nosotros no dijimos la frase maldita, aunque doy fe de que el que escribe la pensó. Un par de consejos del tipo "cuando quieran pidan tiempo muerto" y similares. Había que seguir así, con trabajo duro. Una vez nos refrescamos volvimos al tajo.

La segunda parte comenzó con sorpresa. Ed salió de la puerta para convertirse en uno de los jugadores más rudos que se han visto en todo el torneo. Noel asumió el papel de portero. En la primera jugada, Ed se ganó el cartelito de "rudo": le hacen un amago y se lo come hasta dentro, pero como buen exbalonmanista recuerda aquel sabio consejo de "pasa el jugador o el balón", y atropelló sin ningún pudor al fintador, que se enojó. Pidió disculpas aunque la hostia no había estado mal y por dentro pensaba "pero cómo eres tan tonto". Los primeros minutos buscaron el contragolpe. Antonio, Guardiola y el Rookie, junto con Ed en alguna ocasión, lo estaban dando todo, arriba - abajo, metiéndole caña. En uno de esos contraatques se consigue el objetivo buscado: superioridad y aprendiendo de nuestros errores abrimos el campo, uno por cada banda y otro por el centro. Guardiola, como gran distribuidor, se lo da a Ed en la parte derecha, Amaga y sienta al portero, eleva el balón para cederlo al Rookie, pero en ese momento llegó un defensa de ellos para meter el pecho y emulando a Saúl en capítulos anteriores establecer el 3 - 0 en el electrónico. Todo funcionaba, calidad a raudales. Palabra clave con ese resultado AUTOBÚS. Pero las jóvenes figuras del equipo no se conforman con el resultado, y tienen su premio. Rookie consigue de un potente zapatazo el 4 - 0. La vieja guardia les pide mesura a la hora de atacar, pero la vanidad les cegó. No conseguimos el quinto, pero sin embargo ellos sí que nos hicieron el primero. A pesar de las meritorias actuaciones de Noel, ahí no pudo hacer nada. Minuto 6 y 4-1. Tiempo muerto. Decimos otras cuatro cosas (como veréis se dijeron 12 cosas en total), volvió Ed a la puerta y Noel al trabajo sucio. El partido discurría sin mayor problema: que si Ed paraba sin despeinarse, coletazos y picotazos letales en nuestros ataques... lo del resto del partido. Que si Antonio falla una a puerta vacía, que si ellos pegan al palo otra. Pero en ese momento, el tonto que prometía actuó.

MOMENTO TANGANA Noel le quitó el balón limpiamente enviándolo a saque de banda, pero él se quejaba de que era el tercer golpe que recibía y se atrevió a empujar a Noel. Se hizo la paz, pero nadie olvidaba lo sucedido. En la siguiente jugada Noel marcaba a dicho tonto y al arrebatale por anticipación una pelota éste se atreve a echarle la zancadilla por detrás. La ira me ciega y con el balón en juego abandono la portería para decirle un sutil, pero efectivo a 10 cm de su cara "dedícate a jugar que si jugamos a dar hostias a ver quién gana". Tras mi actuación de pacificador, con cara de mala leche eso sí, vuelvo a la portería, no les vaya a dar por tirar. Parece que el hombre se calma. Sin dejar su tontería, pero se calma. Ahora se dedica a chutar con todas sus ganas todo lo que ve. Lástima que sólo diera a sus compañeros, que los pobres bastante tenían con aguantarle. En un momento dado se le ocurrió que sería gracioso ponerle la planta del pie a Antonio cuando se disponía a perforar las mallas. Me enojé y me dirigía hacia aquel lugar, pero a medio camino se empezó a disculpar. A partir de ahí no pasó mucho más. Conseguimos marcar el quinto, ellos de churro metieron el segundo y a dormir el partido hasta el final.


Una victoria merecida que sirve para mantener intacto nuestro honor. Evitamos la cuchara de madera y nos fuimos felices para casa. Los nombres de los héroes son :


- DIEGO, Guardiola
- ANTONIO, Helguera
- ADRIÁN, el Rookie del mes de Noviembre
- NOEL, el Uruguayo
- JUAN, Ed Paralotodo Warner



Felicidades a los héroes y nos vemos en la próxima entrega


Pull the string and then will never rain

4 comentarios:

Portu dijo...

¡Maldición! Ya sabía yo que hoy tocaba exhibición. Se podía palpar en el ambiente universitario durantes estos días. Por desgracia, mis deberes extradeportivos me han impedido asistir a tamaña demostración de talento, poderío y saber estar.

De eso que se han librado los chavales, que en la banda tengo más peligro que Vanderlei.

Ya tenemos un quinteto para la leyenda.

Ni los Lakers del '88, oigan.

Anónimo dijo...

Coño! Jamás penser en leer esta noticia este año... pero bueno, os veo fuertes! Eso sí, a cualquier cosa llamais tangana... me esperaba un cabezazo de noel o una barrida tipo "toco jugador, toco balón, adios jugador, me quedo con el balon" que tanto nos acostumbraba Rubo... En fin, a ver que tal el siguiente torneo!

Anónimo dijo...

El mamón de arriba sin nombre soy yo...

el_irlandés dijo...

Bien muchachos, bien. Siempre hay que ganar al menos uno. Ánimo chavales. Que no decaiga la cosa y que juanisho explique cuál es el honor ese al que hace referencia. No recordaba que aún nos quedara de eso.