miércoles, enero 04, 2006

Mi presi me pone

No me explico cómo llevando casi un año de andadura en este blog aún no se ha hecho mención alguna acerca de ÉL. Con el juego que da. Sí, lo habéis adivinado, me estoy refiriendo al Presidente de la Comunidad Autónoma de Cantabria, Don Miguel Ángel Revilla.

La leyenda del indomable

Un ejemplo a seguir. Un hombre hecho a sí mismo, venido de lo más recóndito de la rural realidad montañesa. Un hombre que ha sido capaz de desconcertar a todo quisqui cuando tras compartir 8 años de gobierno cántabro con el PP, en las últimas elecciones se dijo "por qué no" y decidió prestar su apoyo al PSOE, con los que ahora mismo forma una bonita y entrañable coalición. Un hombre que con sus comparencencias públicas está llevando el nombre de Cantabria a lo más alto. A continuación, una selección de perlas de su cosecha.

Para empezar, nada mejor que recordar sus palabras del 11 de septiembre de 2005 en el balcón del edificio del gobierno regional protestando por la descalificación en la Regata de la Concha en San Sebastián, Guipúzcoa, de la trainera cántabra de Pedreña y que supuso la victoria final de la guipuzcoana de Fuenterrabía.

"Cada vez que ganamos nos tienen en vilo, porque se creen los inventores del remo y al perder la bandera de La Concha actúan como si les arrebataran el Árbol de Guernica [...] Dan ganas de decirles que remen ellos."

Ahora bien, lo mejor estaba por venir, ya que en el Debate de las Comunidades Autónomas en el Senado de España, del 7 al 8 de noviembre de 2005, sus intervenciones le elevaron a los altares de los programas de zapping patrios.

"Aquí todos han venido a vender su libro. Sí, sí, a vender su libro... a echar la llorada."

Refiriéndose a que los presidentes de todas las comunidades van a quejarse de su situación y a pedir al Presidente del gobierno central.

"Podría entender que llorasen los de Extremadura o Cantabria, pero no ésos."

En referencia a las Comunidades Autónomas de España con un 20% de riqueza superior a la media de la Unión Europea.

"Le voy a decir una cosa, presidenta: ¡Madrid somos todos!. El 85 % de los gastos por transporte y protocolo se hacen en Madrid... ¡y eso que vengo en taxi! No se ría, y eso que usted antes veraneaba en Cantabria y ahora lo hace en Asturias."

Dirigiéndose a Esperanza Aguirre.

"Señor Presidente, Cantabria, que es una región solidaria, que no crea problemas, que no es conflictiva, que arrima el hombro, que creemos en la solidaridad, pluralidad y diversidad, que creemos en España y en la Constitución, esperamos que estas cuestiones pendientes, que creo que son de justicia, se solucionen."

Refiriéndose a la terminación de obras de infraestructuras en Cantabria. A eso le llamo yo vender bien el producto.

"A los cántabros nos llaman cucos. El cuco es un pájaro, en el norte de España... bueno supongo que en el resto también, si hay cucos. Bien, pues el cuco es un pájaro que el muy puñetero pone los huevos en el nido de otro y éste se los cría. Nuestras abuelas iban a parir a Barakaldo, al País Vasco, para librar a sus hijos de la guerra."

Refiriéndose que en el siglo XIX los vascos estaban eximidos del reclutamiento obligatorio hasta la Segunda Guerra Carlista.

"¡Ojalá que el Senado fuera siempre así, todas las semanas, qué maravilla! ¡Bueno, al presidente del Gobierno le traeríamos sólo una vez al mes!"

Comentario final del Presidente cántabro en su segunda intervención en el debate.

Pero sin lugar a dudas lo mejor de lo mejor, best of the bests, last but not least, tuvo lugar tras el turno de Pasqual Maragall en el que afirmó su emoción al oír la palabra Cataluña. Ahí nuestro Revilluca se desmelenó y sorprendió al personal pronunciando las siguientes palabras que ya forman parte de la historia reciente de nuestro peculiar país.

"A mí, oír la palabra Cantabria me pone, señorías, que me pone, me pone... ¡Pero también me pone oír la palabra España!"

Frase que ha refrendado recientemente en su discurso regional navideño, difundido incluso por la televisión nacional

"Los cántabros tenemos muy claro lo que somos: Cántabros y españoles."

Predicando con el ejemplo

Aprovechando su reciente visita a la Moncloa para, tras bajarse de su ya mítico taxi, estampar un buen par de besos en ambas banderas ante la sonrisa cómplice de Peta Zeta. Además de para reincidir en sus declaraciones en el programa Noche Hache alabando cierto producto gastronómico cántabro

"Yo no he encontrado a nadie a quien no le guste el jamón de jabugo y las anchoas del cantábrico. Conozco gente a la que no le gustan las angulas, el caviar... pero el jabugo y las anchoas no hay chino, japonés....azteca, al que no le gusten. El Presidente me ha confesado que en la cena de Nochebuena las anchoas fue lo que más le gustó a él y a su familia."

World's Finest

Y eso por no mencionar el revuelo que causaron sus declaraciones en una cadena local acerca de sus experiencias en el casamiento del Príncipe. Amén de esa peacho campana de 650 kilos que los cántabros le ofrecimos como regalo de bodas. Lo dicho, un grande.

Ahora, convertido en estrella mediática, nos tiene a todos impacientes por saber por dónde saldrá en su siguiente comparecencia. Mientras llega el momento, podéis calmar vuestras ansias echando un vistazo a la sección multimedia del blog El cántabro perplejo, donde encontraréis un extracto de sus mejores apariciones televisivas recientes.

¡Long life, Revilluca!

1 comentario:

el_irlandés dijo...

Que sí señó, así me gusta a mí.

Que viva revilla y su tierrucaaaaaaaaaaaaaa!.

Y el tío con albarcas a todas partes. Con dos cojones.