domingo, mayo 22, 2005

42 x 26

Hola muchachos, les habla la reencarnación del irlandés, porque el irlandés original murió el sábado subiendo a los lagos. Los de Covadonga, ya saben, esos que están muy arriba en Asturias, donde la sidra y su princesaaaaaa. Muy, muy arriba. Cagoentó, arriba de cojones. Y además el genio ingenieril que decidió hacer la carretera debía tener poco presupuesto así que para ahorrar cogió abajo escuadra y cartabón y toma recta que te cagas hasta el mismito borde de los ercinas y los enoles de las pelotas. Nada de curvas para suavizar, que eso es de maricones y yo aquí no estoy para gilipolleces así que to a derechu que dicen en Liébana, y si patinan las ruedas pues ponéis cadenas. U os compráis un tractor que esos suben de narices. No te jode. Así le quedó la obra al neandertal este, que la puta carretera no baja del 10% ni en los descansillos.

Pues resulta que yo ni tengo cadenas ni tengo tractor. Yo tengo una bici. Sí sí, de esas cosas con dos ruedas y pedales que usaba Induráin para ganar Tours a machete. Creo que se acuerdan, quizá hayan visto alguna por la calle. Y no, no funcionan con gasolina, los pedales hay que apretarlos, y bien fuerte. Pues yo que soy asín como que un poco subnormal, me gusta la bici y cansarme y sudar y mens sana in corpore sano y todas esas milongas del karma y el bienestar y el plan 365 especial k. Así que en vez de ir en coche a los sitios como todo hijo de vecino (que es la ostia de descansado y no llegas oliendo a choto a los lugares importantes), pues voy en mi Orbea ortera de 14 velocidades, con sus dos rastrales bien puestos y del año de la polka mandarina.

Inciso para los no entendidos en cosas que se salgan del tdi, abs, etc y todas esas cosas, Orbea = marca de engendros ciclísticos. Rastrales = utensilios donde en los años 50 se colocaban los pies en los engendros ciclísticos.

Bien, creo que iba por la polka mandarina. Pues yo que soy un tiarrón del norte que te pasas y joder yo soy invencible y todas esas cosas que dicen los tiarrones del norte, me dio el fin de semana, con algún otro colgado que también tiene una de estas cosas de dos ruedas y pedales, por ir a una marcha cicloturista (dícese de una reunión de personas con piernas esbeltas, depiladas y con fuerte olor a réflex que montan auténticas máquinas de 27 velocidades y pedales automáticos como dios manda, y, bueno, también estoy yo y mi orbea). La marcha en cuestión constaba de 111 kilómetros y tres puertecillos. Uno primero otro en medio y otro al final. El primero es el del mirador del Fito que quizá les suene de pasada porque lo suelen subir en la vuelta y en los perfiles tiene un “1ª” puesto encima que viene a querer decir que mecagoensuputamadre. El segundo ni me acuerdo de cómo se llama porque era muy suavecito, de esos que tiene un “2ª” puesto encima que traducido es mecagoensumadre. Y el último, y meta de la carrera, era la ya mencionada subida a los putos lagos de mis huevos (ese es el nombre que les dan los lugareños, y por algo será). Este suele tener una “E” puesta encima. Yo les explico no se preocupen:
- “mecagoencienmilvecesenlaputísimamadredelsubnormalquediseñóestacarretera”.

El primero, el Fito este, lo subí bien. Muy bien incluso. Sobrado. Ahí es nada, 7 km al 6,5% de media y ni enterarme. Pin pan pún y arriba. Claro, te coge fresco en el 10 de carrera. Joder qué bien voy, iba yo pensando, a estos hoy les doy matarile. Pues matarile rile rón, hete aquí que voy y pincho bajando el susodicho puerto. Joder. Joder. A cambiar la rueda. Y claro esto no es como en la tele, que de repente se para el coche y se baja un señor muy majo que antes trabajaba en ferrari y que en unos 3,2 segundos te ha cambiado la rueda pinchada, la otra también por lo que pueda pasar y te ha engrasado la bici de arriba abajo. No. Eso es matrix y no hay que creérselo. En la vida real te jodes, y te manchas, y sacas la cámara y los desmontables y joder no entra la puta cubierta y todas esas cosas que pasan cuando intentas cambiar una rueda. Conclusión 20 minutos al saco y ya vas el último. Los compañeros que te esperan y te miran como si tuvieras la lepra. No les culpo. Yo hago lo mismo cuando pinchan ellos.

Pues ya acabamos de bajar el Fito y se pone a llover de lo lindo. Mierda. Rastrales, lluvia = mala combinación. Bueno qué se le va a hacer. Es sólo agua. Y con el agua y con eso de ir últimos y en solitario nos colamos en un cruce y para cuando nos queremos dar cuenta ya hemos dado una vuelta extra de 10 km. Somos así de machos, el recorrido normal no era suficiente. Conclusión otros 20 minutos al saco. Y los compis que no dicen nada pero te miran de reojo y murmuran. Así que tú qué vas a hacer. Pues resignación, que la has liado tú solito, así que metes plato fijas la vista en la línea blanca y leña al mono que es de goma por unas carreteras pestosas de la muerte. Toma 25 km para cada pierna que suman 50, ahí a cara de perro y dale candela a ver si cogemos a alguien. Menos mal que los otros al cabo de un rato se sienten mal y salen de detrás de tu culotte y te dan algún relevo. Claro no coges a nadie. Porque es imposible y todo el mundo lo sabe.

-Tú solo tirando y machacándote = 30 km/h. Y tú puteado cual moro en comisaría.
-Grupetto bien formado con cuatro maquis de los del réflex a la cabeza, y tú ahí detrás sin asomar la pitota no vaya a ser que te dé la brisa = 35 km/h. Y tú fresco cual lechuga en ensalada.

El caso es que subes el segundo puerto. Cuando la cosa empieza a picar para arriba preguntas a voces a un paisano de la organización que cuánto tiene el puerto, y el tío te responde a más voces que desde ahí 5 muy suaves. Bien, cojonudo. Al cabo de 4 km desde ese punto ves un cartel que pone “principio puerto: 5 km”. Te ciscas en todos los antepasados del susodicho paisano. Llegas arriba, bastante bien, porque el puerto es asequible, pero 80 km son 80 km y empiezan a pesar.

Bajas el puerto. Esta vez no pinchas. Y sin más, ahora sí dándonos relevos como dios manda porque los amiguetes ya me veían un poco congestionado y pensaron que ya había pagado por mis pecados, pues llegamos a un sitio con mucha gente mirando y sonrisas de ya veréis ya, aquí empieza lo bueno. Y justo en ese punto pues giras a la izquierda y lo ves. Recta. 10%. Muro. 100 metros a cañón. Qué se le va a hacer, a ello vamos, vista y al toro. Empieza el único infierno que acaba en un puto lago. Coges aire, tocas a zafarrancho, quitas plato y metes toda la artillería pesada. Ahí va, soltad amarras y hierro a saco. Toma piñonada. Problema: mi orbea es del año de la polca mandarina y cuando llegas al 42 x 26 ya no da más. Ahí se queda, tanto si quieres como si no. No tienes más coronas. Para que ustedes lo entiendan, como si intentas subir esa misma cuesta con un coche y en cuarta. Pues como que no. Bueno, tú eso ya lo sabías así que aprieta el culo y da al pedal. Y es que en estos puertos ni grupettos ni gaitas en vinagre, cada uno a lo suyo, con su sufrimiento y como buenamente pueda, ya saben, que cada palo aguante su vela. Así que te pones. Subes. Llegas a la curva y otra pared igual. Joder cómo está el patio. Bueno, dale candela. Después de enecientas curvas y tropecientos muros todos muy similares entre ellos y unos 20 minutos de subida empiezas a pensar que ya no hay de dónde sacar. Y eso no suaviza ni pa dios. Así que empiezas a retorcerte como una puerca encima de la bici y subes tan despacio que cuentas los radios al pasar. Luego empiezas a hacer eses, como un borracho, te sientas, te levantas, pero ni de una ni de otra, o eso suaviza o mueres. Y joder si suaviza. Sí, sí, por mis cojones. Ves en la curva de izquierdas, una de tantas, un cartel inocente: “Huesera”. Qué leñes será eso piensas tú. Pues nada, un pequeño muro de 400 metros recto como una estaca y al 15%. Mecagoensatán. Ahora sí que voy dao. Aquí no tienes dudas sobre si de pie o sobre si sentado. De pie y a lo Escartín, chepa apuntando al cielo y más vaivenes que Rocco en sus películas. Da igual. Revientas. Así que cuando empiezas a sentir arcadas (ya os he dicho que yo soy un pelín gilipollas) y por más que hagas el pedal no baja, bandera blanca y pie a tierra. Humillación donde las haya para cualquiera que monte en bici. Te sientas. Bebes agua. Te cagas en todo lo que se menea y en la madre que parió todas las hueseras de este mundo y del más allá. Pero claro, por mis cojones que llego arriba. Aunque sea con la bici a cuestas, fíjate. Así que te vuelves a subir en el potro de tortura, y dale para arriba por mis santos huevos. Cuatro km más arriba pues llegas a meta, no sin antes intentar degollar a todo el que lleva diciéndote que ya queda poco cuando todavía quedaban como 30 minutos de suplicio chino. Su puta madre. Y os juro que no sé por qué llegas arriba, porque vas tan reventado que te duele hasta la cara que lleva 10 minutos que se te duerme. Como se lo cuento. Según pasas el cartel de los huevos tiras la bici y te traen un plátano. Sonríes, cómo que un plátano, traiga para acá la caja que la voy a dejar temblando. Eres el último me dicen. Y, su hermana ¿qué tal folla?, les digo yo. Qué carácter dicen ellos. Como el de vuestra puta madre, digo yo. El caso es que sí, fui el último, bueno, el último de los que fueron suficientemente imbéciles como para llegar arriba, que hubo unos cuantos que decidieron que sí, pero que mejor otro día, que ese les picaba un huevo y no estaban para tonterías.

Joder qué largo se ha hecho esto. Bueno, nunca suban a un lago, ni charca, ni laguna, ni charco en bici. Están muy arriba y corres el riesgo de morir por el camino. Y si suben, por el amor de dios, metan un desarrollo como mandan los cánones y no un 42 x 26. Háganme caso. Reventarán.

Eso es todo amigos.

4 comentarios:

Portu dijo...

Eso te pasa por no ir hasta arriba de creatina y nandrolona. Si no, otro gallo hubiera cantado. De todos modos, vaya mi enhorabuena al Pantani de los Filtros de Wiener.

Juan_isho dijo...

Ahi estamos, y no contento con morir el sabado se dedica a retar a su padre para ganarse el pan en su propio hogar.

Todos queremos ser como .....


El gallo-ardilla de 13 metros.

FCG-A 13m. Fundacion Cuidadora del gallo-ardilla de 13m

Anónimo dijo...

el inefo anonimo dice: saliendo la noche antes y mamao, hacer 7 km en 33 minutos es mas q aceptable, portu, la creatina en este caso no vale para nada :P

Portu dijo...

Musculitos, cuando aprendas a comentar en el post adecuado y no en un enlace que te traslada a un artículo de un año atrás, hablamos. Hasta entonces, no me dirijas la palabra.